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Una vez más, tres de esos buques serán gaseros, prueba de que las antiguas Astano y Bazán mantienen su elevada especialización en este mercado. A estos buques se suman cuatro petroleros.
Al mismo tiempo, los responsables de esta unidad de negocio continúan manteniendo negociaciones con las navieras más destacadas del sector para lograr más encargos en los próximos meses. Todos los buques, comprometidos hasta la fecha, efectuarán trabajos de inspección y revisión rutinaria.
El segundo trimestre del año ha arrancado en los muelles y diques de las factorías de Ferrol y Fene con la llegada de un barco, el “Brasil, Voyager”, que se sumó a los tres que ya habían arribado con anterioridad en la ría.
En la actualidad, las obras en curso generan trabajo para cerca de 400 empleados de compañías auxiliares. La empresa calcula que, junto a las tareas que se llevarán a cabo en los barcos ya atracados, la ocupación podría llegar a los 800 trabajadores.
Sin lugar a dudas, grandes noticias para la ciudad naval.
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